LAS IGLESIAS DE LALIBELA
Yo, el mago viajero, llegué a las iglesias de Lalibela, volando en mi máquina del tiempo, pasé por unas altas nubes y dí muchísimas vueltas a la Tierra, para llegar a ese año.
Cuando llegué vi a su majestad el Rey de Lalibela mandando edificar las 13 iglesias. Yo me acerqué e intenté ayudar, pero en vez de eso, el rey me dijo que me quedara junto a él, que me iba a enseñar unos túneles subterráneos. Cuando me iba a adentrar en uno de ellos, mi máquina hizo: ¡poffffffireeeee!. Fui corriendo para coger mi teléfono móvil; sí, el del futuro; para contactar con los amigos del CRA Orba...
¡No me lo cogieron! No me quedó otro remedio que pasar allí la noche. Muy a mi pesar, a las doce...o la una de la madrugada, unos ruidos turbaron mi sueño, me despertaron, abrí los ojos y observé como un ángel estaba cavando la tierra. Después de un rato comenzamos a hablar. Le expliqué mi problema, a lo que me ofreció sin dudarlo su ayuda, por lo que regresé a mi casa envuelto en sus alas de algodón.
Cuando llegué al cole le conté a mis amigas la increíble historia que me había sucedido. Al principio sentí miedo, pero todo terminó felizmente y fue todo muy, muy divertido.
¡Hasta el próximo viaje del mago viajero!
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